El gobierno de Ecuador apelará a todos los mecanismos posibles en la arena internacional en la defensa de su derecho soberano a conceder asilo y a proteger su soberanía, adelantó hoy una fuente oficial.
Entrevistado por Prensa Latina aquí, Rafael Quintero, subsecretario de Relaciones Exteriores, afirmó que su país recabará la opinión pública mundial ante las amenazas británicas de invadir la embajada de Ecuador en Londres para arrestar a Julian Assange.
«El mundo va a conocer quién es quién en la política internacional e incluso en el país se conocerá de qué lado están aquellos que heredan la Carta Magna como un gran propósito derechos individuales y ahora los niegan», aseveró.
El también secretario general del Partido Socialista Frente Amplio expresó que en Ecuador hoy existe un gobierno que defiende la soberanía y tiene el valor de hacerlo a la luz pública y en la arena que sea necesaria. Además, apuntó, este país defiende la tesis de su política exterior sobre la base de la integración y los hermanos latinoamericanos han respondido como se esperaba, y todavía se espera un pronunciamiento en la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) y de la Organización de Estados Americanos (OEA).
Expuso que tras la condena de Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) y de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA), ya existe un camino andado en esta batalla ganada, aún cuando encuentren quienes consideran desde siempre que podrían aplastar a los países de la región.
Calificó de vigorosa la política exterior de Ecuador en derechos humanos y recordó que esta es la nación latinoamericana que más refugiados acoge, lo cual fue reconocido hace dos meses atrás en el seno de las Naciones Unidas durante el informe de labores presentado por el gobierno.
De ahí que, dijo, el asilo concedido al fundador de Wikileaks es coherente con la defensa desde Ecuador del principio del derecho de los individuos como una condición del derecho de todos.
Para el funcionario de la Cancillería ecuatoriana, mientras Latinoamérica avanza en esta materia del modelo civilizatorio, algunos países de Europa parecen retroceder con esas declaraciones de amenazas.
«Son desplantes que se hacen a nivel inclusive de las casas presidenciables europeas, no se diga ya de quienes no tiene mucho andar en el republicanismo y que todavía son monarquías que heredan una dosis de autoritarismo de centurias atrás», concluyó.
