El exmilitante del PRE, Fernando Rosero, manifestó que en marzo de 2007 recibió una llamada telefónica, presuntamente del presidente Correa, quien supuestamente le pidió el número del celular de Elsa Bucaram Ortiz, vocal del desaparecido Tribunal Supremo Electoral (TSE), pues quería pedirle su “ayuda” para evitar que legisladores de oposición “desestabilizarán” su gobierno.
Sin embargo el régimen ha negado enfáticamente un acuerdo político con esa tienda política, afirmando que el único acuerdo que el gobierno tiene es con la ciudadanía y que jamás se pactará con los causantes de la tragedia del país.
Rosero fue candidato por el PRE en las elecciones presidenciales en 2006 alcanzando apenas 113.323 votos. Tiene a su haber nueve casusas judiciales desde el 2003 por asociación ilícita, daño moral, entre otras. él asegura que varias actuaciones de Elsa Bucaram en el TSE fueron parte de un acuerdo entre el PRE y el Gobierno para traer al máximo líder Roldosista, exiliado en Panamá desde 1997.
El propio asambleísta Bucaram Pulley negó rotundamente que en 2009 haya existido un pacto político con el gobierno. En diciembre de ese año, el legislador afirmó que nunca trató el tema jurídico de su padre. “En lo absoluto”, respondió a la pregunta de una periodista.
Según Rosero, Correa le pidió que le proporcionara el número del celular de Elsa Bucaram Ortiz, vocal del desaparecido Tribunal Supremo Electoral (TSE), pues quería pedirle su “ayuda” para evitar que legisladores de oposición “desestabilizarán” su gobierno.
Días antes, una mayoría de vocales del TSE (integrada por su presidente, Jorge Acosta, Hernán Rivadeneira, René Maugé y Elsa Bucaram) había dado vía libre a la consulta popular para que se instale la Asamblea Constituyente.
En Teleamazonas, en julio del mismo año, Bucaram Pulley manifestó que es falso que su padre haya pactado con el Presidente Correa. “Esto es absolutamente falso”, dijo claramente, añadiendo que no se dio ningún acuerdo de este tipo.
A pesar de haber confesado la inexistencia de un pacto político con el régimen, el legislador del PRE cambió de discurso y ahora asegura que tal acuerdo sí existió y para intentar demostrarlo, incluso permitió publicar fotos de sus hijos para fines políticos.
Foto: El Universo