El fundador de WikiLeaks, Julian Assange, tildó ayer de “victoria histórica” el asilo diplomático y calificó a Ecuador de “valiente nación independiente latinoamericana”.
“Si bien (la decisión de) representa una victoria histórica, nuestros problemas acaban de comenzar. La investigación sin precedentes de Estados Unidos contra WikiLeaks debe parar”, dijo el activista luego de escuchar las declaraciones del canciller ecuatoriano, Ricardo Patiño.
El australiano dio las gracias a “los ciudadanos ecuatorianos, a su presidente, Rafael Correa, y a su Gobierno” pero advirtió de que “las cosas se van a volver ahora más estresantes”.
“No fueron ni el Reino Unido ni mi país natal, Australia, los que se levantaron para protegerme de la persecución, sino una valiente nación independiente latinoamericana”, manifestó.
Assange también consideró “importante” recordar a Bradley Manning, el militar estadounidenses acusado de ser fuente de Wikileaks, “que lleva detenido sin haber sido juzgado durante más de 800 días».
“La tarea de proteger a WikiLeaks, a sus empleados, sus simpatizantes y sus supuestas fuentes continúa”, agregó el australiano.