Hoy, en el archipiélago de Galápagos en Ecuador comenzó el proceso de clasificación y agrupación de 35 mil llantas desechadas en la isla Santa Cruz. La medida forma parte de una campaña de reciclaje para limpiar el conjunto de islas, Patrimonio Natural de la Humanidad, de materiales tóxicos y recipientes que permiten la proliferación de mosquitos transmisores del dengue.
Alrededor de veinte guardaparque iniciaron la remoción de los neumáticos en el sitio El Mirador, ubicado al ingreso de Puerto Ayora. Luis Mora, responsable de Gestión Ambiental y Ordenamiento Territorial, de la Dirección del Parque Nacional Galápagos (DNPNG), explicó que las llantas serán clasificadas por tamaño y luego serán trasladadas en barcos hasta territorio continental, entre el sábado y el domingo próximos.
El plan de recolección de llantas, patrocinado por el Ministerio de Ambiente, comprende también la difusión radial y televisada de mensajes ambientales para la recolección de objetos tóxicos. El perifoneo en los barrios también es una opción.
Un estudio calcula que en las islas San Cristóbal e Isabela, existen 8 mil y 3 mil llantas desechadas, respectivamente.
Anualmente, el Estado ecuatoriano invierte más de seis millones de dólares en fumigación de neumáticos, este es un artículo peligroso para el medio ambiente, pues su quema afecta la capa de ozono. Por eso la DPNG lidera esta iniciativa para proteger el ecosistema insular, a sus habitantes y a los miles de turistas.