Desde hoy en el colegio Benalcázar se realizará un muestreo de las rúbricas de las organizaciones que ya fueron inscritas y una validación manual de las adherencias a los partidos y movimientos que están en trámite.
El Consejo Nacional Electoral (CNE) apuesta por el muestreo matemático de firmas de los 12 partidos y movimientos que ya fueron inscritos y la validación manual de firmas de las 10 organizaciones que están en trámite para depurar el registro de organizaciones políticas que usaron firmas falsas para la reinscripción.
Domingo Paredes, presidente del CNE, propone que este trabajo se realice en una tarea titánica de 15 días, que se ejecutará abiertamente desde hoy, a las 13:00, en el colegio Benalcázar, de Quito.
La entidad tiene establecido un calendario: del 31 de julio hasta el 2 de agosto se realizará el muestreo de las organizaciones que ya fueron inscritas. Y, desde el 3 de agosto hasta 13 de ese mes se realizará la verificación de las firmas de las organizaciones que aún están en trámite. Entre ellas están Avanza, Concentración de Fuerzas Populares (CFP), Suma, Partido Socialista.
Paredes precisó que en este proceso podrán participar los representantes de las organizaciones políticas, quienes deberán acreditarse para asistir como veedores.
La consejera Nubia Villacís señaló que trabajarán con 450 personas, en tres turnos, las 24 horas del día. El vicepresidente Paúl Salazar explicó que el mecanismo automático de validación de firmas usó un sistema parametrizado que fue implementado por el anterior CNE y que en un Consejo Consultivo con las organizaciones políticas se decidió no cambiar las reglas de juego ni el procedimiento, que ya se venía implementando con organizaciones como el Movimiento Popular Democrático, Partido Roldosista Ecuatoriano, que fueron los primeros en reinscribirse ante la entidad.
Salazar recordó que en una auditoría interna el CNE detectó anomalías en el uso de las firmas de 293 funcionarios de la entidad, por ello sostuvo que se alertó del caso a la Fiscalía y de inmediato se realizó una auditoría informática para determinar las responsabilidades administrativas. “Es un fraude que contribuye a deslegitimar el proceso electoral. Vamos a llegar hasta las últimas consecuencias”, dijo.
El funcionario señaló que estas investigaciones avanzan y que ahora se realizó ya un levantamiento de las pruebas y análisis forense de las bases de dato de la entidad.
Paredes dijo que la única responsabilidad que tiene la institución es de transparentar el proceso y que por ello, apenas conocieron de la adulteración de las 293 firmas de los funcionarios de la entidad, denunciaron el caso ante la Fiscalía, como órgano regular, que permita abrir una fase indagatoria para dar cuenta de lo que sucedió. “Lo más sencillo es siempre buscar un ‘chivo expiatorio’, el CNE no es el instrumento válido para que se diga que recogió firmas, elaboró y llenó formularios, sino que la entidad recogió las cajas que fueron entregadas por las organizaciones políticas”.
Villacís compartió el criterio y recordó que cada formulario de firmas de inscripción cuenta con una firma de responsabilidad de la organización política, además de una versión juramentada, en donde el responsable de la organización jura que la información es verdadera. Pero Paredes añadió que incluso se detectó que hay firmas adulteradas de los responsables de las organizaciones políticas.
Pidió a las directivas de las organizaciones que den nombres de la cadena de responsabilidades, en donde el CNE no puede excluirse, “sabemos que hay delincuentes dentro de la institución, pero la cadena debe descubrirse”.
Paredes señaló que se conoce de empresas fantasmas que se dedicaron a enriquecerse a través de la recolección de firmas, cobrando 25 centavos, 50 centavos y hasta un dólar por cada firma para el proceso de reinscripción.
Auditoria interna del CNE
El Presidente del CNE manifestó que si el muestreo de firmas de las organizaciones que ya fueron inscritas revela que un 10% de las firmas son falsas, “ya hay una alarma que nos permitirá ampliar la investigación en esa organización”. Mientras que en las que aún se encuentran en trámite, este proceso se realizará con los representantes de las organizaciones políticas que deberán estar presentes.
En el caso de las organizaciones que presenten firmas adulteradas, Paredes fue enfático y acotó que se aplicará todo el rigor de la ley. “No pensamos en la magnitud que se nos venía”, confesó el titular del CNE.
Recordó que el viernes pasado la entidad aprobó el reglamento de auditoría interna del proceso del CNE, en donde las organizaciones tienen la responsabilidad de designar un auditor operativo e informático que realice un seguimiento de todo el proceso electoral.
Paredes señaló que el contralor Carlos Pólit se comprometió a enviar un experto para realizar la auditoría interna de la entidad, en donde participará personal de la Escuela Politécnica Nacional.
Este nuevo proceso se realizará tanto con veeduría nacional internacional, pues se invitó a participar a representantes del Instituto Federal Mexicano, así como de los Consejos Electorales de Perú, Bolivia y Colombia. Paredes no descartó invitar a la Organización de Estados Americanos (OEA) para que participen como veedores y les acompañen en el proceso.
Así, también, el Registro Civil entregó toda la base de datos a la entidad para alimentar todo el sistema informático del CNE y aportar con la verificación de las firmas adulteradas. Paredes señaló que no se prevé un cambio en las fechas electorales, solo en el supuesto que todos los partidos violaron la ética política.
Más denuncias llegan
Ayer cientos de personas llegaron a las oficinas del CNE para entregar el formulario en donde solicitan que se les retire como adherentes a las organizaciones políticas. Los consejeros de la entidad precisaron que hoy se conocerá cuántas personas han denunciado una falsificación de información para la reinscripción de los partidos políticos. Andrés Aguilera y Andrea Martínez están como adherentes a Ruptura 25.
Los dos estudiantes señalaron que jamás firmaron ningún formulario. “Me molesté porque tomaron mis datos, jamás he participado en ningún partido”, dijo Aguilera. Mientras que Martínez precisó que llegará hasta las últimas consecuencias. Por ello, luego de entregar la solicitud en el CNE puso la denuncia en la Fiscalía.
Hasta ayer en esa entidad se presentaron más de 30 denuncias. Catalina ávila consta en el movimiento Avanza, mientras que su esposo en Poder Ciudadano. Para ella, lo molestoso del proceso es el trámite, “es todo un proceso para desafiliarme de algo que yo no he pedido”, manifestó. Ambos pusieron también su denuncia en la Fiscalía.