En los exteriores de la embajada paraguaya de Quito se congregaron un grupo de ciudadanos para protestar contra el Golpe de Estado Express que laceró la democracia y provocó la salida del líder Fernando Lugo. Ahí estuvo la asambleísta María Augusta Calle para acompañar a quienes rechazaron el suceso que terminó con la posterior designación de Federico Franco como mandatario paraguayo.
Después del pronunciamiento del Presidente de Ecuador, Rafael Correa (quien dijo que no reconocerá otro gobierno que el de Fernando Lugo) la legisladora Calle señaló que lo sucedido en Paraguay es una esperpéntica máscara de lo que es un Golpe de Estado” antes de exponer que “los 39 legisladores pertenecientes al partido liberal, al partido colorado que gobernaron más de 60 años en Paraguay decidieron reemplazar a los millones de paraguayos que eligieron en las urnas al presidente Lugo”.
En otra parte de su diálogo con TC Televisión, María Augusta Calle hizo una analogía del Golpe de Estado Express en Paraguay con el sucedido en Honduras, que provocó la salida del ex presidente Zelaya. No escondió su desacuerdo con esa reedición del 30 S de Ecuador, incluida en Bolivia. Además, Calle advirtió que “un cambio de gobierno en menos de 24 horas muestra la ilegitimidad del proceso”.
Horas antes el mandatario ecuatoriano Rafael Correa Delgado, manifestó que independientemente de la decisión del Presidente Fernando Lugo, independientemente de la decisión que tome Unasur, hemos tomado la decisión de no reconocer ningún otro Gobierno que no sea el presidido por Fernando Lugo Méndez”.