Un grupo de 22 niños de la fundación Cecilia Rivadeneira (que tiene como misión trabajar por los infantes que sufren de cáncer) asistieron al Estadio Olímpico Atahualpa para observar el encuentro entre Colombia y Ecuador, gracias a una invitación realizada por el Ministro del Deporte, José Francisco Cevallos.
El Secretario de Estado extendió esta invitación, la cual la pudo realizar con el apoyo de la Concentración Deportiva de Pichincha (CDP), que permitió el ingreso de los pequeños al palco en donde fueron ubicados para que puedan ser parte de la hinchada ecuatoriana.
El momento les hizo olvidar su situación, pues su atención estaba en el campo de juego y se unían a los gritos, comentarios y alientos de los 38.000 aficionados que asistieron la Coloso de El Batán. Sus brincos, gritos y sonrisas retumbaron en el escenario cuando Cristian Benítez anotó el gol ecuatoriano al minuto 54.
En el entretiempo cada chico recibió un refrigerio y una camiseta de la selección entregadas por Marathon Sports, con lo que se confundían con toda la hinchada. Al concluir el partido, cada uno de los invitados expresaba su felicidad a su manera, conversando, riéndose y mirando la cancha en la que los jugadores festejaban la victoria obtenida frente a Colombia por 1-0.
“Sentí mucha emoción cuando ingresamos a la cancha, me encantó venir a ver el partido”, expresaba la pequeña Camila González, que acompañó al conjunto colombiano en la salida a la cancha.
Por su parte, Cristian Jaramillo, de 12 años de edad, indicaba su felicidad al poder saludar a su ídolo Antonio Valencia, “me tocó salir con los colombianos pero pude saludarlo antes de entrar a la cancha”, expresó. Además, resaltó que lo mejor de haber asistido al Atahualpa fue la victoria del conjunto tricolor. “Esta experiencia nadie la tiene, de poder salir con los jugadores y ver la victoria de nuestro país”, señaló con una sonrisa.
Para culminar su visita, el grupo se tomó la foto del recuerdo y abandonaron el escenario acompañados por la gente que conforma la fundación que trabaja cada día por darles a estos pequeños luchadores mejores días.
Foto: El Ciudadano