Uno de cada cuatro menores en España, un total 2,2 millones, vive en hogares que están por debajo del umbral de la pobreza, por lo que por primera vez estos conforman el colectivo más pobre del país, según un informe de Unicef España hecho público este lunes.
De acuerdo con el estudio «El impacto de la crisis en los niños», en dos años ha crecido en 205.000 el número de niños que vive en hogares cuyos ingresos son inferiores a 16.000 euros (unos 20.500 dólares, al cambio actual) anuales para una unidad familiar de dos adultos y dos niños.
De esta forma, la pobreza infantil, estabilizada durante años en torno al 24 % de la población menor de edad, ha superado el 26 %, un porcentaje que está casi cinco puntos por encima de la media nacional en 2011 y que nunca se había alcanzado para esta franja de edad desde que existe la Encuesta de Condiciones de Vida (2004).
También revela el aumento del número de familias en situación de vulnerabilidad.
El informe destaca que el número de hogares con niños con todos los miembros adultos sin trabajo ha crecido un 120 % entre 2007 y 2010, casi dos veces más que el total de hogares, lo que demuestra que el impacto de la crisis está siendo más fuerte en las familias con menores que en aquellos núcleos en los que no los hay.
Además, los datos de Unicef España ponen de relieve que se ha intensificado la pobreza en aquellos hogares que ya padecían una situación de pobreza crónica -aquellos que llevan tres de los cuatro últimos años bajo el umbral de la pobreza-.
«La pobreza tiene rostro de niño», dijo la directora de Unicef España, Paloma Escudero, en la presentación del informe.
Alertó, asimismo, de que los niños sufren la crisis especialmente en aquellos hogares que se han visto obligados a reducir sus gastos en productos de primera necesidad, como la alimentación, la atención médica o el material escolar.
España atraviesa desde finales de 2007 una grave crisis económica, con un desempleo creciente que afecta ya a 5.639.500 personas, un 24,44 % de la población activa.
«Hay más niños pobres y son más pobres», dijo la responsable de Unicef España, quien explicó que la intensidad de la pobreza en España es muy alta.
España tiene el porcentaje de menores de 18 años que viven en hogares con pobreza alta (ingresos por debajo de unos 11.000 euros para cuatro miembros), más elevada de todos los países de la UE-15 y sólo lo superan Rumanía y Bulgaria en la Europa de los 27, señala el informe.
Además, la pobreza de los niños se está haciendo cada vez más persistente.
Así, según el informe, el crecimiento de la pobreza crónica en la infancia entre 2007 y 2010 ha sido del 53 %.