El Festival Internacional de Cine Documental EDOC11, con sede en Ecuador, expresa pluralidad de voces en los 29 idiomas representados en los 85 filmes en concurso, afirmó su director ejecutivo, Manuel Sarmiento.
Sarmiento dijo que entre los preceptos que dieron origen en 2002 a este evento cultural, denominado Encuentros de Otro Cine, de ahí sus siglas, en primer lugar está la promoción de la libertad de expresión, «un concepto manoseado, pero importante para nosotros».
Explicó que para los organizadores, esta décimo primera edición es una posibilidad de mostrar la diversidad de voces existentes en este género y de poder convertirse en sí misma en un agujero en el mundo de la incomunicación, «en medio de un panorama audiovisual monopolizado y monotemático».
Como ejemplo citó el hecho de que en las salas comerciales de Ecuador el 99% de los filmes exhibidos son en idioma inglés subtitulados en castellano, sin embargo este Festival ofrece una dimensión de lo que se está perdiendo el país cada día en la programación de cine y televisión.
«Por eso hablamos de libertad de expresión y de estéticas, de pluralidad sin condicionamientos», apuntó.
Sarmiento señaló que este es esencialmente un festival del llamado documental de autor, no solo enfocado a informar o a educar, sino a ofrecer un punto de vista de un tema de la realidad.
Reflexionó en torno a que, pese a que es un género de mucha producción mundial, no tiene mucho acceso ni a la televisión ni salas de cine comercial, sino muy rara vez porque «no interesan estos contenidos y más bien están a la caza del gran público del espectador masivo».
«Es una lucha encarnizada por la audiencia, es más barato producir y parte del gusto masivo, pero no les pasa por la cabeza exhibir otras narrativas que se detengan a analizar una historia o tengan ciertos rasgos de experimentación artística», añadió.
En cuanto al desarrollo de este festival, manifestó su satisfacción porque esté vigente, con calidad en las exhibiciones y en crecimiento, aunque todavía es preciso incrementar la cantidad de salas, donde se muestren las obras en concurso.
Por último consideró reconfortante que esta cita se haya convertido en un oasis en la industria audiovisual mundial, en el cual todavía, dijo, es posible crear libremente, sin que las consideraciones financieras sean determinantes sobre las obras.