El conflicto de tierras en la zona fronteriza de Morona Santiago deja hasta el momento una persona muerta y cuatro viviendas incendiadas. Las autoridades locales quieren que se declare el estado de excepción para evitar más violencia.
En la madruga de ayer, personas no identificadas llegaron en una canoa y quemaron cuatro viviendas. Otros señalan que hubo una explosión y que eso provocó el incendio. Las personas afectadas acusan al diputado alterno de Diana Atamaint, Rosendo Nurinkias, de estar detrás de los incidentes.
Iván Delgado, secretario de la Asociación Asapuma, dijo que la violencia empezó la semana anterior. Según él, nativos de la zona están armados y han puesto en zozobra a la población de Puerto Morona.
Según el dirigente, los pobladores del sector de Shaime duermen en el monte por temor a los enfrentamientos luego de la muerte de Carlos Noboa la semana anterior. él falleció en un confuso incidente por la tenencia de tierras entre shuars y colonos en un espacio de 700 hectáreas en disputa en la zona fronteriza con Perú, en la provincia de Morona Santiago.
Los colonos afirman tener los títulos de los terrenos, en cambio los indígenas shuar aseguran que están recuperando territorios ancestrales. “Esos terrenos pertenecen a los señores López, Valencia, Galarza, Asociación de Agricultores de Puerto Morona, Cajamarca, Astudillo, Villamagua, entre otros”, indicó Delgado.
Pero el conflicto se extendió hasta la madrugada de ayer a Puerto Morona, donde fueron incendiadas las viviendas. Según Delgado, el problema debe ser solucionado lo más pronto posible para evitar un enfrentamiento mayor en la zona. Ayer elementos militares y de la Policía llegaron hasta este lugar para apaciguar los ánimos de los bandos enfrentados.
Rosendo Nurinkias, asambleísta alterno por Morona Santiago, desde la clandestinidad desmintió que dirija los enfrentamientos. “Es una acusación falsa y eso no voy a permitir”, aclaró el legislador.
Nurinkias señaló que los terrenos en disputa han sido tomados de forma legal. “Nuestras tierras han sido usurpadas por gente de la Costa y de la Sierra de manera inconsulta”, denunció.
Mientras tanto, el gobernador Juan Arcos llamó a la tranquilidad de los pobladores y dijo que el estado de excepción permitirá una mayor presencia policial y militar, así como también el control de armas.