El partido izquierdista Syriza reiteró ayer su rechazo a formar parte de una coalición de Gobierno en Grecia junto al socialdemócrata Pasok y los conservadores de Nueva Democracia, lo que dificulta la formación de un Ejecutivo y abre más la puerta a la convocatoria de nuevas elecciones.
El jefe de Syriza, Alexis Tsipras, argumentó tras su reunión con Evangelos Venizelos, líder del Pasok, que el compromiso de austeridad pactado por los dos grandes partidos griegos con la Unión Europea es el gran escollo para formar parte de ese Ejecutivo, según recogió el canal NET. “El memorándum (con la UE) no ha sido rechazado por Syriza, sino por el pueblo griego”, declaró Tsipras, en relación a la caída de apoyos del Pasok y Nueva Democracia, en las elecciones del pasado domingo.
La participación de Syriza en una coalición de Gobierno había sido la condición exigida por Dimar, una formación de centro-izquierda, para pactar una alianza con los otros partidos que dé al Ejecutivo griego la mayoría absoluta en el Parlamento. Por su parte, Evangelos Venizelos, líder del Pasok, advirtió a Tsipras que su creciente popularidad, el suyo fue el segundo partido más votado, debe ir acompañado de más responsabilidad y no de más arrogancia.
Venizelos devolverá hoy el mandato de formar Gobierno al presidente Karolos Papulias, de quien se espera que el lunes convoque a los líderes de todos las fuerzas parlamentarias y les inste a formar un Ejecutivo de unidad nacional. De no lograrse un acuerdo, el jefe del Estado convocaría nuevas elecciones, probablemente el 10 o el 17 de junio.