La Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH), entre los que se encuentran numerosos inmigrantes, inició este jueves en toda España la recogida de un mínimo de 500.000 firmas para presentar una iniciativa legislativa popular en favor de la dación en pago de viviendas a cambio de deudas hipotecarias.
El acto simbólico del comienzo «oficial» de la recogida de firmas se celebró hoy en Madrid, frente al Parlamento español, donde varios miembros de la PAH y algunas de las personas afectadas desplegaron pancartas con leyendas como «subasta de pisos, otra obra social de las cajas, «bancos usureros» o «alquiler social».
Según los promotores de la iniciativa legislativa, entre ellos la ecuatoriana Aída Quinatoa, la recogida de firmas tiene plazo hasta noviembre próximo y la posibilidad de solicitar una prórroga de tres meses, aunque algunos de ellos auguran que esa cifra de firmas será conseguida en un lapso muy breve.
El portavoz de la Plataforma, Chema Ruiz, destacó la importancia de que prospere la Iniciativa Popular «porque -dijo- tenemos que demostrarle a los políticos que somos millones las personas que exigimos justicia social».
Ruiz describió una situación de «drama social y colapso del sistema financiero y económico» en España, en el que «cientos de familias son desposeídas de su casa y condenadas a perpetuidad».
El portavoz destacó que con el punto de partida de que «la vivienda es un derecho fundamental», la Iniciativa legislativa Popular tiene como una de las reivindicaciones fundamentales «que sean paralizados los desahucios y que las familias no sean echadas a la calle como perros».
También, la disposición de una «ley de dación en pago retroactiva que permita entregar la vivienda como pago de la deuda y evitar así la condena social a perpetuidad».
La Iniciativa aboga además por la configuración de un sistema de «alquiler social» vinculado a los ingresos y en el que el alquiler no superase el 30 por ciento de la renta familiar.
Quinatoa, presidenta de la Coordinadora Nacional de Ecuatorianos en España (CONADEE) y portavoz de la PAH, denunció además el hecho de que los bancos sólo les pidiesen a los inmigrantes el pasaporte para otorgarles créditos, pero ahora estos no pueden ser firmantes de la iniciativa legislativa si no tienen doble nacionalidad.
Hizo también un llamamiento para que sean suspendidas las identificaciones y multas «racistas» efectuadas y aplicadas por la policía durante los desahucios.
«Los inmigrantes somos víctimas, igual que todos los españoles, porque los bancos y los políticos sin escrúpulos han hecho un sistema para hipotecarnos de por vida», afirmó Quinatoa.