El presidente Rafael Correa, en el Enlace Ciudadano 270, emitido desde el popular sector de Carapungo, en el norte de la capital, dijo que la hidroeléctrica Ocaña, recientemente inaugurada en la provincia del Cañar (sur andino), remplazará la energía térmica que quema combustible, principal contaminante en el país y, por ende, del ambiente.
El Primer Mandatario explicó además que este proyecto califica para el Protocolo de Kioto. “Con energía eléctrica renovable y limpia, la hidroeléctrica Ocaña califica para el Protocolo y mecanismos de desarrollo limpio, por la conservación ambiental que produce una hidroeléctrica, energía limpia renovable que remplaza las termoeléctricas”, enfatizó.
La hidroeléctrica, con una capacidad de generación de 26 megavatios (MW), permitirá ahorrar al país alrededor de $40 a $50 millones anuales, y una reducción de emisiones de CO2 por el consumo de carburante para el funcionamiento de las termoeléctricas.
La proyección del Ecuador es llegar al 2016 con el 93% de energía hidroeléctrica y renovable para poder diversificar la matriz energética. La conservación del medio ambiente es una de las principales prioridades del actual gobierno.