El líder de la Revolución cubana, Fidel Castro, cuestionó los derechos que el mandatario norteamericano, Barack Obama, se tomó para juzgar y matar en Afganistán, de acuerdo con una reflexión publicada hoy por la prensa.
«¿Tiene acaso el Presidente de Estados Unidos el derecho a juzgar y el derecho a matar; a convertirse en tribunal y a la vez en verdugo y llevar a cabo tales crímenes, en un país y contra un pueblo situado en el lado opuesto del planeta?», cuestionó Fidel Castro.
«Nadie que sea honesto estará jamás de acuerdo con los actos terroristas», aclaró el líder histórico cubano.
El Premio Nobel Obama, comentó, «viajó aceleradamente a Afganistán como si el mundo ignorara los asesinatos masivos, la quema de libros que son sagrados para los musulmanes y los ultrajes de los cadáveres de las personas asesinadas».
«Vimos al presidente subiendo al trote los peldaños de una empinada escalera, en mangas de camisa, avanzar con pasos acelerados por un pasillo volante y detenerse a endilgarle un discurso a un nutrido contingente de militares que aplaudían con desgano», añadió.
«Pensaba en los colosales gastos que eso implica y que el mundo paga, pues ¿quién carga con ese enorme gasto que ya rebasa los 15 millones de millones de dólares? Eso es lo que ofrece a la humanidad el ilustre Premio Nobel de la Paz», subrayó.
Al cumplirse el primer aniversario del asesinato de Osama Bin Laden, señaló, «Obama compite con su rival Mitt Romney en la justificación de aquel acto perpetrado en una instalación próxima a la Academia Militar de Pakistán, un país musulmán aliado de Washington».
«Obama, en cambio, ¿qué es, en qué cree?», se preguntó Fidel Castro al explicar que los presidentes de Venezuela, Hugo Chávez, y de Ecuador, Rafael Correa, son cristianos.
«No hay dudas de que Obama fue cristiano; en una de las vertientes de esa religión aprendió el oficio de transmitir sus ideas, un arte que le significó mucho en su ascenso acelerado dentro de la jerarquía de su partido», manifestó.
«Carlos Marx y Federico Engels nunca hablaron de asesinar a los burgueses. En el viejo concepto burgués los jueces juzgaban, los verdugos ejecutaban», recordó el líder revolucionario.