El presidente de Ecuador, Rafael Correa, señaló este sábado que Julian Assange ha sido calumniado, perseguido y linchado mediáticamente por revelar miles de mensajes que pusieron en jaque a la mayor potencia del mundo a través de Wikileaks.
Durante su informe semanal de labores, Correa expuso que, sin embargo, la prensa opositora no ha publicado los cables diplomáticos estadounidenses del país difundidos por Wikileaks pese a lo interesante de sus revelaciones.
Según el Mandatario, Ecuador no sale tan mal parado en esos mensajes de la Embajada de Washington porque (en los cables) se señala que los ecuatorianos son muy nacionalistas respecto a la soberanía del país, y anunció que estos cables serán difundidos.
Expuso que en Wikileaks se describe la disputa entre dos grupos mediáticos en Ecuador y cómo llegan a un acuerdo para no dañarse mutuamente, e incluso se menciona entre los contactos de la misión norteamericana a Fundamedios, un órgano nacional.
Correa informó que esta semana concedió una entrevista desde Quito a Assange para su programa El mundo de mañana, que empezará a transmitirse en la cadena Rusia Today y donde él será el primer invitado para la serie, que será vista por más de 200 millones de personas.
Recientemente, Assange también sostuvo una entrevista exclusiva con diario El Telégrafo, el cual señala que con la revelación de Wikileaks la historia de la humanidad tomó otro rumbo.
Pero también, el periodismo ingresó en una crisis y autoevaluación de su sentido y trabajo sobre lo que informa en torno a determinados hechos.
El australiano, por su parte, señaló que si un medio es grande y poderoso está en capacidad de ponerse por encima de la ley, y se refirió a la expulsión de la embajadora estadounidense en Quito, Heather Hodges.
La diplomática habría comentado en un mensaje que el presidente Correa conocía sobre los presuntos actos de corrupción de un alto jefe policial.
De acuerdo con Assange, antes de que Ecuador tomara esa decisión fueron expulsados diplomáticos de México y de Libia.