Las autoridades paraguayas concretaron hoy la evacuación de unas sesenta familias campesinas e indígenas de la zona más afectada por las lluvias y la crecida del Río Pilcomayo en la región del Chaco, en la frontera con Argentina.
La ministra de la Secretaría de Emergencia Nacional (SEN), Gladys Cardozo, confirmó a Efe que concluyeron las tareas de evacuación iniciadas en la víspera en la localidad de General Díaz, la más afectada por la inundación, en la ribera del Pilcomayo y 450 kilómetros al noroeste de Asunción.
Las personas asistidas ya se encuentran en campamentos que cuentan con energía eléctrica y asistencia médica, detalló la funcionaria, quien expresó que si bien la situación es grave, hay cierto alivio porque «hoy no se produjeron precipitaciones».
Explicó que en las próximas horas también trasladarán a un grupo de cinco familias de distintas comunidades del Chaco, que también delimita con Bolivia y Brasil, al norte y este, respectivamente, y donde se registraron intensas lluvias desde marzo pasado que han causado el aislamiento de comunidades indígenas, ganaderas y agrícolas.
«La asistencia ya ha llegado a más del 40 por ciento del total de las familias afectadas. Vemos que hay una cierta estabilidad del río Pilcomayo y eso nos da un poco de tiempo para trabajar y coordinar cuestiones estructurales», mencionó Cardozo.
Precisó que distribuyeron más de 5.000 kilos de alimentos y que en el transcurso de este domingo un avión de la Fuerza Aérea lanzará contenedores con víveres en varios poblados.
«Actuamos a tiempo para rescatar a las familias, evacuarlas, atenderles, llevarles atención médica, carpas, alimentos. Este es un proceso que va a durar bastante tiempo», comentó la funcionaria.
Los medios de prensa asuncenos indicaron que esa catástrofe, que afecta a alrededor 8.000 familias según cifras oficiales, se ha cobrado tres vidas, la última de ellas una mujer que padecía peritonitis y que falleció hoy, presuntamente, ante la demora de su traslado hasta un puesto de salud.
Unos 400 efectivos militares, dos helicópteros, camiones, embarcaciones y equipo de sanidad y logística se sumaron el viernes a las tareas que lleva a cabo la SEN, que también cuenta con el apoyo de funcionarios de los ministerios de Salud, Obras Públicas, así como de la Cruz Roja, entre otros.
El Poder Ejecutivo decretó el viernes pasado la emergencia en la Región Occidental (Chaco) para disponer de mayores recursos monetarios para asistir a los damnificados, mientras que sigue pendiente de aprobación en el Congreso otro proyecto de ayuda
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