Una fuerza naval partió hoy de Portugal hacia Guinea Bissau, donde el jueves se produjo un golpe estado, con el posible objetivo de evacuar a ciudadanos lusos y de otras nacionalidades de la antigua colonia portuguesa.
El ministerio de Defensa luso informó el viernes en un comunicado de que tenía listo un cuerpo militar de intervención inmediata para esa posible evacuación, pero hoy no se dieron detalles sobre la partida del contingente y fuentes oficiales y medios estatales aseguraron que no tiene todavía un objetivo decidido.
Portugal y los otros siete miembros de la Comunidad de Países de Lengua Portuguesa (CPLP) acordaron el sábado, en una reunión extraordinaria de ministros en Lisboa, organizar una fuerza de interposición para Guinea Bissau en el marco de la ONU y la Comunidad Económica de Estados de Africa Occidental (CEDEAO).
El contingente militar que partió hoy de Portugal hacia el país africano está compuesto por una fragata, una corbeta y un avión Orión P-3 de vigilancia marítima adscritos a la denominada Fuerza de Reacción Inmediata (FRI) lusa.
Aunque no se han dado cifras oficiales sobre los ciudadanos portugueses que residen en la nación africana, medios de Lisboa los cifran en unos 3.500.
La CPLP, que integran Angola, Brasil, Cabo Verde, Guinea-Bissau, Mozambique, Portugal, Timor-Este y San Tomé y Príncipe, exigió a los golpistas de Guinea Bissau la restauración del orden constitucional y la liberación de las primeras autoridades de la nación, que están retenidas y en paradero desconocido.
El golpe se produjo pocos días antes del inicio de la campaña electoral para la segunda vuelta de los comicios presidenciales guineanos, y los alzados en armas pidieron la formación de otro Gobierno y la convocatoria de nuevas elecciones.
Tras dos días de negociaciones con los militares, representantes de los partidos anunciaron hoy en Bissau la próxima creación de un consejo nacional de transición cuya composición y mandato serán examinados el lunes