La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) anunció ayer que aceptó la invitación para visitar Ecuador y evaluar su “situación de libertad de expresión”, y espera establecer próximamente una fecha para el viaje.
Así lo indicó el presidente de turno de la CIDH, el mexicano José de Jesús Orozco Henríquez, en una conferencia de prensa en la que se defendió de las acusaciones al organismo expresadas el jueves por el canciller ecuatoriano, Ricardo Patiño, tras una reunión privada con los comisionados en Washington.
“Saludamos esa invitación y acordamos que una vez que la misma se formalice, podamos fijar la fecha correspondiente, porque hay interés por parte de la CIDH en visitar al Estado”, dijo Orozco a un grupo de periodistas al término del 144 periodo de sesiones del organismo.
Patiño invitó el jueves al pleno de la Comisión a visitar su país para que “conozcan ‘in situ’ la situación de la libertad de expresión” y “superen la información que reciben de los medios de comunicación, que en muchas ocasiones es bastante sesgada y en otras verdaderamente falsa”, según indicó a periodistas.
Los comisionados no han decidido aún, sin embargo, si la visita se realizará de forma plenaria, como ha solicitado el Ecuador, dado que “por razones financieras” la CIDH suele enviar únicamente al relator del país que pide la visita, según explicó la comisionada, Dinah Shelton.
Los miembros de la CIDH evitaron profundizar en las críticas de Patiño, que acusó al organismo de extralimitarse en sus funciones al emitir medidas cautelares para los cuatro enjuiciados en el caso del diario ecuatoriano El Universo.
Orozco explicó que la solicitud de Ecuador de una reunión privada en la CIDH “no estaba relacionada con abordar un caso específico”, y que de ser así, el organismo habría debido organizar una “audiencia pública y con la participación de todas las partes implicadas”, de acuerdo con la Convención Interamericana de Derechos Humanos.
Por tanto, cuando la delegación ecuatoriana planteó sus preocupaciones sobre el caso de El Universo, la Comisión señaló “que no podríamos hacer ningún registro específico en los archivos de la comisión de ninguno de esos planteamientos”, indicó.
No obstante, el comisionado rechazó las críticas generales a su procedimiento de emisión de medidas cautelares y las acusaciones de Patiño de que “violó la Convención Americana” al emitirlas o de que lo hizo con “fines políticos”.
“La Comisión está convencida de que todas y cada una de las decisiones que hemos tomado han estado estrictamente ajustadas al marco jurídico interamericano aplicable”, afirmó Orozco.
Las observaciones expresadas “en términos generales” por Ecuador sí serán tenidas en cuenta por la CIDH, que “las analizará dentro del proceso de reforma del Sistema Interamericano de Derechos Humanos” que se encuentra en curso, según precisó el secretario ejecutivo de la comisión, Santiago Cantón.