El Jefe de Estado aclaró que los diálogos con Europa no son para la firma de un Tratado de Libre Comercio (TLC), sino de un acuerdo comercial.
En una entrevista concedida a Gama TV la mañana de este viernes, el Presidente Correa recordó que una de las peticiones de la dirigencia indígena fue la suspensión de los diálogos con Europa para realizar un acuerdo comercial.
“Y después son los que proclaman la consulta previa (para la minería)”, comentó, al evidenciar la contradicción de los sectores opositores.
Explicó que la firma de un tratado comercial no implica que se firme un TLC. Las flexibilizaciones que Ecuador exige del acuerdo comercial incluyen al campo de compras públicas, un poderoso instrumento de desarrollo local, en el que sin la regulación podrían participar empresas europeas.
El Mandatario indicó que si pretenden que se respeten los derechos de propiedad neoliberales, para que se patente lo que los indígenas ya conocían hace tres mil años y que los ecuatorianos paguen por algo que les pertenece desde siempre, es imposible firmar un acuerdo comercial.
Asimismo, reiteró que Ecuador no aceptará que las inversiones tengan más derechos que los seres humanos, ni una “desgravación arancelaria que ponga en peligro nuestra producción nacional”.
“En principio se acordó negociar en el marco de lo acordado con Colombia y Perú, pero con la flexibilización que Ecuador requiere (…). Si no nos otorgan eso, podemos vivir sin un TLC con Europa”, aseveró el presidente