El filme francés «The Artist»se convirtió anoche en Los ángeles en el gran ganador de la 84ª entrega de los premios Oscar que otorga la Academia de Cine de Hollywood, institución que representa a la más grande industria del entretenimiento del mundo.
Finalmente, cuando la puja por los premios se hacía cada vez más intrigante, «El artista» remontó abruptamente y empató en cinco premios con la “La invención de Hugo Cabret”, y lo hizo alzándose con estatuillas de mucho más peso como las que correspondieron a los rubros mejor película y director.
El cineasta francés Michael Hazanavicius dedicó el lauro a su esposa (la actriz franco-argentina Berenice Bejo, quien cayó como actriz de reparto ante Octavia Spencer, de “Historias cruzadas”) y, tres veces, a Billy Wilder.
El triunfo de »El artista» demostró que la crisis del cine norteamericano es aguda y que los mismos integrantes de esa gran industria lo ratificaron con su votación inapelable.
También «El artista» se llevó el Oscar a mejor actor de 2011 para Jean Dujardin, cuyo nombre es sorpresa porque hasta ahora sólo había protagonizado los tres anteriores filmes de Hazavinicius, aunque llegó a Los ángeles con el antecedente de haber ganado varios premios por este primer papel de trascendencia internacional.
El premio a mejor música también fue para la película de Hazanavicius, responsabilidad de Ludovic Bource, habitual colaborador en cortos publicitarios y largometrajes del cineasta, mientras que el palmarés se completó gracias al vestuario urdido por Mar Bridges.
De sus 11 candidaturas, «La invención de Hugo Cabret», último filme, por ahora, de Martin Scorsese, se llevó cinco lauros técnicos (fotografía, dirección de arte, sonido, mezcla de sonido y efectos especiales), igualando sólo en cantidad a «El artista».
El premio a mejor actriz, entregado por Colin Firth, lo mereció Meryl Streep por su interpretación de Margaret Tathcher en «La dama de hierro», de Phyllida Lloyd, con el que alcanzó el tercer Oscar de su extensa carrera.
El guión adaptado elegido por los miembros de la Academia de Hollywood para esta entrega fue el de Alexander Payne, Nat Faxon y Jim Rash de «Los descendientes», según el original de Kaui Hart Hemmings, mientras que el original fue para Woody Allen por «Medianoche en París», pero el artista neoyorquino, fiel a sus principios, no estuvo presente en la fiesta.
El premio al mejor actor de reparto, entregado por Melissa Leo, fue para el británico Christopher Plummer, de 82 años, por su rol en «Principiantes» y que le valió convertirse en el más longevo ganador de un Oscar, lauro al que arribó tras haber sido distinguido por el Sindicato de Actores y el Bafta.
En el filme, dirigido por Mike Mills y protagonizado por Ewan McGregor, Plummer interpreta a un anciano enfermo de cáncer.
El Oscar destinado a mejor canción recayó en la pegadiza y oportuna «Man or Muppet», de Brett McKenzie, del filme «Los Muppets», que se escucha en uno de los mejores momentos de la película y el de efectos especiales atendió los muy elaborados diseños de «La invención de Hugo Cabret», responsabilidad de Rob Legato (el mismo de «Avatar»), Joss Williams, Ben Grossman y Alex Henning.
En el apartado dedicado a los filmes de habla no inglesa, se impuso “La separación”, del iraní Asghar Farhadi, quien aprovechó el paso por la ceremonia para señalar: «ofrezco orgullosamente este premio a mi país, a un pueblo que respeta todas las culturas y civilizaciones».
En tiempos en que los políticos hablan de guerra, intimidación y agresión, el nombre de nuestro país, Irán, toma la palabra aquí a través de su gloria, de su rica cultura, que ha pasado por momentos políticos difíciles», expresó Farhadi quien con su película logró imponerse a la belga «Bullhead», a la israelí «Footnote», a la polaca «In Darkness» y a la canadiense «Monsieur Lazhar».
El listado general también dio lugar al cortometraje de ficción (el irlandés «The Shore», de Terry George), al documental (“Saving Face», de Daniel Junge, que muestra en Pakistán cómo un cirujano ayuda a recuperar los rostros de mujeres atacadas con ácido por resistirse al matrimonio) y al corto de animación («The Fantastic Flying Books of Mrs. Morris Lesmore», que sus autores subieron a YouTube).