Collas y Ruta Viva serán las dos vías de acceso al nuevo aeropuerto internacional de Quito, en Tababela. Con su ejecución se espera descongestionar la Interoceánica, que conecta a la capital con el Valle de Tumbaco; pero la complejidad de la obra y la búsqueda del financiamiento aplazarán la entrega.
Augusto Barrera, alcalde de Quito, manifestó que la inauguración del nuevo aeropuerto del Distrito está fechada para octubre de este año.
Así, el acceso desde el hipercentro estará encaminado por la Interoceánica, en la primera etapa, por la cual circulan alrededor de 50 mil vehículos al día, según la Empresa Pública de Movilidad (Epmmop).
No obstante, el objetivo del cabildo es la descongestión de la Interoceánica. Por tal motivo, las vías Collas y Ruta Viva, que serán construidas por el Gobierno Central y la Municipalidad, respectivamente, propenderán a dinamizar el acceso hacia la terminal aérea.
Está previsto que la ruta Collas empiece a operar en abril del 2014. La vía es de aproximadamente 10 kilómetros de longitud, que se extiende desde la vía Calderón-Guayllabamba hasta la parroquia Tababela, donde se edifica la terminal aérea. Según María de los ángeles Duarte, ministra de Transporte y Obras Públicas, la entrega será a destiempo, por la complejidad del terreno de construcción.
La Ruta Viva, por su parte, estará totalmente habilitada en noviembre de 2013, 16 meses después del inicio de sus obras (mayo de este año). Germánico Pinto, gerente de la Epmmop, indicó que el acceso al aeropuerto está garantizado porque une Quito desde la avenida Simón Bolívar hasta Puembo.
“Construiremos un nuevo puente sobre el río Chiche, que llegará hasta Puembo. Desde allí será posible movilizarse a Tababela por la Interoceánica y una vía paralela que será construida en el sector. El acceso al aeropuerto estará garantizado desde varios frentes de las parroquias rurales del nororiente de Quito”, explicó Pinto.
El financiamiento para Collas, actualmente en construcción, asciende a $ 110 millones por parte del Gobierno. Por otro lado, la Ruta Viva tiene un costo total de $ 190, de los cuales $ 51,4 millones ya fueron desembolsados por la Corporación Andina de Fomento en la primera etapa de la obra.