La jueza Quinta de lo Civil de Pichincha, Mercedes Portilla, evitó pronunciarse sobre la publicación de un medio local, el cual asegura que no aprobó las pruebas psicológicas tomadas por el Consejo de la Judicatura de Transición (CJT), en octubre de 2011, a los postulantes para jueces de la Corte Nacional de Justicia.
Portilla fue la encargada de emitir sentencia en el caso “Gran Hermano”, en el cual están involucrados los periodistas Juan Carlos Calderón y Christian Zurita, quienes aseguraron que el presidente de la República, Rafael Correa, conocía de los contratos que mantenía su hermano Fabricio con el Estado. En la sentencia de Portilla ordena a los periodistas deben pagar un millón de dólares cada uno al Mandatario por “daño espiritual”.
Ayer la funcionaria cumplió con sus actividades normales. No obstante, se abstuvo de hablar con los medios de comunicación. Indicó que lo único que se debe conocer es la sentencia emitida para los periodistas.
Tampoco indicó si ha pedido la reconsideración de su evaluación, ni se pronunció sobre la apelación presentada por Ramiro Aguilar, abogado de los autores del libro El Gran Hermano, ante la Corte Provincial de Pichincha.
Según el Reglamento General del Proceso de Evaluación, los jueces debían sumar 70 puntos como mínimo.