Luego de una semana de la explosión del búnker del Grupo de Intervención y Rescate (GIR), el Ministerio del Interior, ya atendió el 90% de las denuncias presentadas por los afectados.
El Comité de Crisis, conformado por el Ministerio del Interior, Policía Nacional y la empresa Fabrec, contabilizó 1200 familias afectadas, alrededor de 10 mil personas de los siete sectores asentados en los alrededores del GIR, en Pusuquí, al norte de Quito.
Para la reparación de daños el Ministerio desembolsó $346 176. De este rubro, el 70% se invirtió en la reposición de vidrios y puertas; 20%, en la reconstrucción de viviendas; y el 10%, en la reparación de vehículos y otros daños.
Mientras, Fabrec trabaja, en doble jornada, en la reconstrucción de las instalaciones del GIR y la Escuela de Policía que tendrá una inversión de $600 000.
La atención del Ministerio a los afectados fue inmediata, la misma noche del 8 de diciembre entregó plásticos para suplir los vidrios de ventanas destruidas y mantiene la protección policial en cada sector.
La Dirección Nacional de Salud de la Policía, movilizó brigadas de médicos especialistas y psicólogos, para atender a los moradores y estudiantes de los centros educativos afectados.
Previa autorización del juez competente y en presencia del fiscal Pablo Santos, se destruyó el material explosivo incautado en operativos, que se encontraba en el GIR.
Los sectores poblados afectados fueron: Pusuquí, Pomasqui, Carcelén Bajo, Carcelén Alto, La Josefina, Conjunto habitacional 2 Hemisferios y San Gregorio.