Este jueves cerca de las 5:00 de la madrugada murió la poeta ecuatoriana Edelina Beltrán Ramos, de 27 años, mejor conocida como Dina Bellrham.
La escritora habría fallecido por una sobredosis de pastillas, según informó Augusto Rodríguez. Su cuerpo será trasladado a Naranjito, donde se realizarán sus servicios fúnebres.
Mañana a las 9:00 saldrán desde la Casa de La Cultura Núcleo del Guayas varios buses que transportarán a las personas que deseen asistir al entierro.
Dina Bellrham era estudiante de medicina en la Universidad de Guayaquil y pertenecía al grupo cultural de jóvenes escritores «Buseta de Papel».
Ganó una mención honorífica en el Primer Concurso de Poesía Ileana Esquivel Cedeño en el año 2008.
En septiembre de este año presentó su segundo libro «La mujer de helio». Su primer libro «Con plexo de culpa» fue publicado en el año 2008.
Mantenía una intensa actvidad en la red por lo que publicó trabajos en diversas revistas virtuales y tenía un blog donde también exponía sus trabajos.
A continuación alguno de sus poemas:
EL ONOMATOPéYICO
el mueble está particulado
tiene frío
él se rompe el corazón
todos los días
por ejemplo:
en el final del giro
cuando me parte
¿cuántas veces tiene que partirse
para sentirse el músculo?
1000:
tan sólo eso,
por ello
hay timbales
cuando habla onomatopéyico
en el inicio del frío
cuando me parte
en el giro de la papila:
la alucinación
lo que pasa es que yo
no me rompo día a día.
ELEGíA INDIVIDUAL DE ENVIDIA NO SANA
mi sueño es una tortuga primeriza en un estanque de agua;
hay un muro de piedras en el hipocampo
mi sueño es una hormiga corriendo en la baldosa
pero el dedo llega antes que se sumerja en un zapato.
todos los dormidos tienen un hueco en el reloj
les duelen sus fragmentos de siestas…
quisiera que tuvieran los días enteros
a ojos abiertos, multiplicados…
áRBOLES
De los árboles
nidos abandonados
pájaros migrando al sur,
de los árboles
su sombra de mandíbula,
mi columna de chimpancé
_____________adormecida
trenes estrábicos
_________invierno
de los árboles
locura y sed,
mis piernas
como paraguas extendidos.
MERCA-NICOMIO
No somos más
que préstamos bancarios
víveres en fila express
dicotomías de funámbulos
y escases de lluvias.
La costumbre
nos lame la entrepierna
nos compra
y terminamos vestidos de puta
repetidos
entaconando sueños.
TE PARECES A MI TABACO
Hoy te pareces a éste pobre cigarrillo, que a escondidas acabo de encender…, en esta noche lluviosa de enero, entre las olas furiosas del ayer… y con el humo incierto, sereno… Mi apenas vicio, sin querer… ha derramado nicotina en mi fe, ha descubierto sonriente, que como él; aunque dañándome, te evaporas silente te vas de mis labios, te dejas perder… Igual que éste cigarrillo en mis manos, que depende de mí para no morir, que pide a gritos mis pulmones ya no sanos, sé que depende de mí que puedas existir…, en ese tiempo vacío que mi tabaco logre vivir… Mi cigarrillo, mi tabaco… ¡que tan bien se parece a ti! Se cuela en mi aire limpio, te cuelas en mis pensamientos…, deja el rastro de un posible cáncer de penas, que así como tú, se encuentra marchito en el cenicero… la colilla del vicio, la ceniza de mi beso sincero.