El Presidente de la República, Rafael Correa, realizó este miércoles un recorrido por las instalaciones del hospital Eugenio Espejo de Quito. Allí constató, muy molesto, que ciertas áreas de este centro hospitalario y edificios anexos son mal utilizados.
El Mandatario inició el recorrido a las 08:00 acompañado por el ministro de Salud, David Chiriboga y la ministra de coordinación de Desarrollo Social, Jeannette Sánchez.
A su llegada el gobernante recibió muestras de afecto de la ciudadanía que asiste a esa casa de salud. «Gracias Presidente por su ayuda» decían varias mujeres y hombres muy emocionados de ver al Mandatario.
Al interior de la casa de salud, también recibió aplausos y agradecimientos de parte del personal; sin embargo, a su paso por emergencia ya observó ciertos inconvenientes.
Posteriormente, se trasladó al edificio que está a cargo de la Vicepresidencia de la República. En este lugar funciona el Centro Integral de Discapacidades del programa Manuela Espejo. Luego se trasladó al Centro de Convenciones Eugenio Espejo, ubicado al costado sur de la casa de salud.
Aquí el Jefe de Estado rechazó que esta clase de edificaciones no tengan una utilidad social, para brindar de una manera efectiva los servicios médicos que requiere la ciudadanía.
«Cómo es posible que existan estos lugares como museos y centros de convenciones, en lugar de adquirir camas”, dijo el Mandatario disgustado y agregó: “Me piden como $400 millones para nuevos hospitales y miren aquí un centro de convenciones sin utilizar. Algo está fallando aquí», cuestionó.
De igual manera, solicitó a los dos ministros que solucionen estos inconvenientes. «Miren como piden para rescatar esto, en lugar de pedir para más construcciones. Por favor optimicen lo que tenemos. Hay que dar prioridades. Afuera hay pacientes esperando 24 horas en los corredores, eso se debe cambiar», enfatizó.
Luego se dirigió a recorrer el noveno piso del hospital Eugenio Espejo. Ese sitio, días atrás, era utilizado como bodega, pero ahora está siendo readecuado por parte del Ministerio de Salud Pública.
Finalmente, por el lapso de una hora, mantuvo una reunión privada con el ministro de Salud, la ministra de Inclusión Social y el gerente del hospital, Víctor Hugo Sevilla.
Una vez culminada la reunión, se trasladó a terapia intensiva para ver el estado de salud de Edison Cocíos, estudiante del Instituto Nacional Mejía, quien el jueves 15 de septiembre, resultó gravemente afectado. Esa mañana, recibió el impacto de una bomba lacrimógena en su cráneo.