Por primera vez desde que llegó a la Casa Blanca en enero de 2009 el presidente Barack Obama encara la desaprobación de la mayoría de la opinión pública de EEUU, según una encuesta del diario The Wall Street Journal y la cadena de televisión NBC.
En la encuesta, publicada hoy y que se basa en 1.000 entrevistas realizadas entre el 27 y el 31 de agosto, el 51 por ciento de los participantes indicó que desaprueba la gestión de Obama, contra un 44 por ciento que la aprueba.
Asimismo, el 73 por ciento de los entrevistados opinó que el país va mal encaminado, «un nivel de pesimismo que no se veía desde finales del 2008 cuando estalló la crisis financiera», según el diario.
La economía de EE.UU. entró en recesión en diciembre de 2007 y salió de ella en julio de 2009, pero aún ahora y, según esta encuesta, más del 70 por ciento de los entrevistados cree que la situación económica no ha tocado fondo todavía.
De todos modos, añade el diario, «la mayoría de los encuestados todavía dice que Obama heredó los problemas económicos del presidente George W. Bush, y que no los causó él».
Los resultados de la encuesta sugieren que el 44 por ciento de los entrevistados se inclinan ahora a votar a un candidato republicano en las elecciones presidenciales del año próximo, comparado con el 40 por ciento dispuesto a reelegir a Obama.
En junio, en una encuesta similar, Obama tenía una ventaja de 45 a 40 por ciento.
«El presidente está perdiendo apoyo de grupos clave incluidos los votantes independientes, las mujeres y los hispanos», comenta el diario.
La opinión negativa acerca del presidente Obama alcanzó el mes pasado el 56 por ciento entre los trabajadores fabriles.
Uno de los sectores que apoyó la candidatura de Obama en 2008 fue el de los sindicatos, pero en la encuesta que publican hoy el Wall Street Journal y NBC casi el 49 por ciento de los miembros de estas representaciones de trabajadores tienen una opinión negativa de la gestión de Obama, comparado con el 45 por ciento que aprueba al presidente.
Obama anunciará este jueves un plan para la creación de empleo, en un discurso que pronunciará ante una sesión conjunta del Congreso de Estados Unidos.
A dos años de terminada la recesión el índice oficial de desempleo se mantiene por encima del 9 por ciento, y la economía no crece al ritmo suficiente como para recuperar los más de 8,4 millones de puestos de trabajo perdidos en la recesión.