La creación de al menos mil pequeñas judicaturas en todo el territorio ecuatoriano y desarrollar un ente encargado de tramitar el 1,2 millón de causas represadas son dos de las propuestas que incluye el plan de reestructuración de la justicia, presentado este 9 de agosto por la Judicatura transitoria.
Al acto, desarrollado en al Palacio de Cristal del Itchimbía, asistió el vicepresidente de la república, Lenin Moreno, quien aplaudió el proceso de cambios. Sin embargo, Moreno advirtió que el trabajo de reestructuración no solo debe considerar el cumplimiento de las metas, sino también la calidad de justicia que recibe la población.
El presidente de la Judicatura transitoria, Paulo Rodríguez, expuso los seis ejes del proceso y reiteró en la necesidad de que en el Ecuador exista un sistema de justicia independiente y autónomo.
Asimismo, se anunció que una veeduría internacional se encargará de verificar los procesos y hacer un seguimiento de los avances. Para ello, hará un informe mensual de labores.
La chilena Marigen Hornkohl, coordinadora de la veeduría, dijo que se formará un equipo especializado para evaluar periódicamente el trabajo.
El vocal Fernando Yávar habló de la creación de las pequeñas judicaturas en todo el Ecuador, porque esto permitirá avanzar en el proceso en forma coordinada en todos los cantones del país.
Mencionó que hay cantones que no tienen jueces, lo cual entorpece la administración de justicia y el desarrollo de los procesos judiciales, que deben ser ágiles y de beneficio para toda la población. Dijo que se revisará el trabajo de algunas oficinas que ya han sido creadas con este propósito.
Por su parte, la vocal Tania Arias señaló que es importante dar equilibrio en todos los órganos de justicia. Dijo que son autónomos, pero de alguna manera deben estar integrados.
También mencionó la necesidad de difundir los servicios que brinda el sistema de justicia para la población.
La semana pasada, la Judicatura transitoria del Ecuador cesó en sus cargos a 161 funcionarios judiciales, entre ellos 38 jueces, 6 juezas y 4 conjueces, como una de las primeras medidas para iniciar el proceso de reestructuración.
De acuerdo a lo planificado, la Judicatura tiene 18 meses para terminar su trabajo y ocho meses tomará el proceso de cambio de jueces.