La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y la Procuraduría General de la República (PGR, fiscalía) señalaron en una rueda de prensa conjunta que la detención se llevó a cabo ayer en una operación que fue resultado de actividades de inteligencia y seguimiento.
De acuerdo con las autoridades, Quintanilla Soriano tuvo una estrecha relación con los dos principales líderes de Los Zetas, Heriberto Lazcano Lazcano y Miguel ángel Treviño Morales.
Además, constantemente realizaba viajes entre Monterrey, capital del estado de Nuevo León, y las ciudades de Saltillo y Monclova, en Coahuila, con el fin de «coordinar aspectos contables y el pago de autoridades que se encontraban al servicio del grupo criminal».
Antes de convertirse en operador financiero de la organización a nivel nacional, fue contador en varios estados donde Los Zetas tienen presencia, como Veracruz, San Luis Potosí y Coahuila, señalaron las instituciones.
Junto a «Adal» también fue arrestado José Guadalupe Yáñez Martínez, alias «El Dos», su ayudante en el manejo de las operaciones financieras en Saltillo, la capital de Coahuila (noreste de México) en un inmueble que utilizaban como casa de seguridad.
Durante la operación fueron incautadas dos armas largas y una corta, cuatro automóviles, equipos de comunicación y documentación.
Los detenidos, presentados hoy ante la prensa, y el material incautado serán puestos a disposición de la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO).
Los Zetas surgieron como un brazo armado del cártel del Golfo, del que se separaron en 2010, e intentan expandir su control territorial en México, lo que los enfrenta contra casi todas las demás organizaciones narcotraficantes.
Cada vez más se involucran en el secuestro y tráfico de inmigrantes indocumentados y tienen una fuerte presencia en Guatemala, donde en mayo pasado asesinaron a 27 campesinos en la norteña región de Petén.