Racionalizar y dar más eficiencia a los subsidios son los mecanismos que el gobierno ha anunciado en varias ocasiones, para lograr el cambio en la matriz energética y lograr principalmente equidad en el consumo y pago de combustibles.
La intención, según el ministro de Recursos Naturales No Renovables, Wilson Pástor, es lograr que quienes más tienen más paguen y así “eliminar los subsidios a las clases pudientes”. Esto acompañado de una agresiva incursión de fuentes de energía renovables y limpias.
Entre 2007 y 2010, el Estado destinó 7 075 millones de dólares para el subsidio a los combustibles. Para el 2011, se estima que ese subsidio (que incluye gasolina, gas, bunker y diesel) se ubique en 2 571 millones.
Para mejorar el destino de las subvenciones se aplicará un sistema informático que permita saber quién consume qué y a dónde va el combustible, sea gas o gasolina. “Este sistema existe en Venezuela y Chile”, comentó Pástor.
El software permitirá ver cuánto combustible salió de un terminal determinado y cuánto transporta cada vehículo para saber quién consume y para qué. Luego vendrá la política de racionalización de subsidio, es decir que esta subvención se focalizará.
Sin embargo, Pástor adelantó que estas estrategias no se aplicarán en el corto plazo.