Benjamín Cevallos reasumió hoy su despacho como presidente del Consejo de la Judicatura, a pocos días de que este organismo sea reemplazado por un entre transitorio y luego de que la semana pasada fuera removido por decisión del juez vigésimo primero de lo Penal, Santiago Coba.
No obstante, una resolución del juez de Flagrancia de la ciudad de Guayaquil, Efrén Lara, dejó sin efecto la destitución, originando una confusa situación en el órgano judicial.
Al asumir nuevamente su despacho, Cevallos dijo que no podía ser destituido por un funcionario de menor jerarquía puesto que eso contraviene normas constitucionales. Rechazó la resolución del juez Coba por la cual ratificaba su destitución y anunció que lo demandará por daño moral y por prevaricato.
Indicó que Coba fue cesado en sus funciones porque pone en peligro la institucionalidad de la Función Judicial. “Ya no es juez porque no cabe que una persona que incluso tiene la osadía de indicar que puede destituir hasta al presidente de la República no puede seguir siendo juez”.
Reconoció que la Función Judicial atraviesa por una situación de caos, pero dijo que permanecerá en el cargo hasta que el nuevo consejo sea nominado. La imagen de la justicia en el país queda “tremendamente deteriorada” por la serie de resoluciones en contrario emitidas en los últimos días, admitió también.
Los ecuatorianos aprobaron el 7 de mayo en un referendo que el actual Consejo sea reemplazado por un organismo temporal que reestructurará el sistema de justicia. El retraso en la proclamación oficial de los resultados ha impedido que la decisión de los ecuatorianos finalmente se aplique.