Carlos Mora, quien fuera el último sobreviviente de los 21 contagiados de VIH en la clínica de diálisis del doctor Galo Garcés, falleció cerca de la medianoche, en Guayaquil.
El joven murió a los 24 años de edad, víctima de un paro cardiaco.
Anoche, luego de regresar del cine compartiendo con unos amigos, Carlitos comenzó a sentirse mal y su madre, Liduvina Peñafiel, lo trasladó hasta la clínica Alborada, en el norte de la ciudad.
En la casa de salud los médicos solo comprobaron su deceso.
En 1.995, el joven y otras 20 personas que sufrían insuficiencia renal, fueron infectados con el virus del sida en la clínica particula de Garcés, ubicada en Miraflores, donde se descubrió que se reutilizaban los equipos de hemodiálisis.
Desde ese entonces, Mora se convirtió en un ícono de la lucha contra la discriminación y la impunidad. Garcés continúa libre y ejerciendo su profesión en Estados Unidos.
El 13 de agosto de 2001 el juicio prescribió y en 2003 los juzgados ordenaron a la Policía que se abstenga de aprehender al médico.
En octubre del 2006, Carlitos publicó un libro denominado «21, historia de un sobreviviente», que recoge sus experiencias.
Su cuerpo están siendo velado en una de las salas de Jardines de la Esperanza.