Benjamín Cevallos, destituido presidente del Consejo Nacional de la Judicatura (CNE), dijo hoy que solamente encargó la presidencia al magistrado Herman Jaramillo y no descartó retomar su puesto, en caso se resuelva a su favor la apelación que presentará.
“Herman Jaramillo ha asumido por cuanto yo me he excusado por el momento. Yo sigo actuando, para mi criterio, como presidente del Consejo de la Judicatura”, dijo.
Cevallos aspira que las acciones legales que interpondrá le permitan retornar y hasta sancionar al juez Santiago Coba por prevaricato, al haber resuelto su destitución.
“Voy a presentar mis acciones y luego estoy pensando en solicitar un juicio penal ante la Fiscalía por prevaricato y otro juicio por daño moral que me está ocasionando en este momento”.
Según Cevallos, el juez de primera instancia, Santiago Coba, debió avisar a la Corte Constitucional del incumplimiento con una resolución, y tras ello era la Corte la que debía decidir su destitución.
Coba destituyó a Cevallos por no acatar la resolución que restituía en su cargo al juez Juan Pablo Hernández.
Por su parte, la ministra de Justicia, Johana Pesántez, dijo que la remoción de Cevallos se trata de una decisión independiente de un juez en la que no está inmiscuido el Gobierno.
“Respeto las decisiones judiciales. La decisión la tomó un juez en ejercicio de sus funciones constitucionales y lo único que hizo fue cumplir la ley. No tiene nada que ver con un tema administrativo o de Gobierno”, remarcó.