La ministra coordinadora de la Producción, Nathalie Cely, afirmó que el proyecto de Reforma Tributaria Ambiental Pro-Salud no afectará a la industria nacional y que el Gobierno tiene listo un plan de reciclaje.
Cely manifestó que existe un plan con el Ministerio del Ambiente para colocar máquinas de reciclaje, que “entregarán” a las personas 2 centavos de dólar por cada botella no retornable depositada. Ese monto es igual al impuesto pagado por el consumidor.
En una primera fase, las máquinas estarán en establecimientos comerciales, playas, puntos estratégicos y de mayor concentración de usuarios.
Inicialmente el Estado importará las máquinas, pero la idea es fabricarlas en el país, dijo Mauricio Peña, viceministro de Producción.
En el caso de las fundas plásticas el impuesto será de 10 centavos y la ministra Cely expresó que la opción será utilizar fundas de tela si la persona no quiere pagar el impuesto. Este gravamen será de aplicación progresiva: empezará con 10 centavos y el objetivo es llegar a 20 centavos en tres años.
Cely aclaró que el consumidor no será afectado y que la idea del Gobierno es impulsar un cambio de conducta y de cultura ambienta. “Si usted tiene su funda de tela, que además tiene comodidades para cargar, no paga el impuesto porque no existe problema, es un incentivo para cambiar la conducta ambiental”.
Con estos impuestos el Gobierno pretende recaudar anualmente 18 millones de dólares en impuesto a las botellas plásticas y 3,2 millones con las fundas.
El ministerio de Finanzas, por medio de un comunicado, informó que los bienes que se gravan tienen sustitutos perfectos. Por ejemplo: fundas de telas y botellas retornables, que son menos perjudiciales para el ambiente. “Es importante aclarar que están exentos del pago de este impuesto el embotellamiento de productos lácteos, medicamentos y otros que no entren en la categoría de bebidas”, destaca el comunicado.
La Reforma Tributaria Ambiental Pro-Salud, también contempla un impuesto a la contaminación vehicular, cigarrillos, bebidas alcohólicas, vehículos híbridos. Con ello, el Gobierno espera recaudar 349 millones de dólares, de los cuales 328 millones irían a mejoras en los sistemas de salud y 21,1 millones para programas ambientales.