La central hidroeléctrica San Francisco está en operación desde este 17 de mayo, luego de una reparación que llevó casi siete meses por parte de la empresa brasileña Odebrecht.
Los 217 megavatios que genera ingresaron al Sistema Nacional de Interconectado (SIN) desde ayer, con lo que se descarta cualquier problema energético. Durante los siete meses de daño, la central Mazar aportó 107 megavatios que dejó de generar la hidroeléctrica.
San Francisco está en el cantón Baños, entrada a la Amazonía ecuatoriana. A la central se le reparó el túnel, la parte alta de la chimenea y la turbina afectada en noviembre de 2010 por la construcción del túnel de 13 kilómetros que conduce las aguas desde el río Agoyán.
Víctor Hugo Jácome, gerente de la Unidad de Negocio Hidroagoyán, explicó que San Francisco opera en su total capacidad y labora “satisfactoriamente”. Dijo que los trabajos efectuados tienen una garantía de cinco años.
Jácome explicó que los deslizamientos presentados en noviembre pasado y la falta de limpieza del túnel antes de entrar en operación provocaron el daño.
San Francisco se construyó en 2004 por un valor de 242 millones de dólares, e inaugurada en 2007 por el presidente Rafael Correa, pero un año después colapsó.
En el 2008 la central registró 17 fallas, lo cual provocó la expulsión del Ecudor de la firma Odebrecht. En abril de 2009 Hidropastaza, interpuso una demanda arbitral contra Odebrecht ante la Cámara de Comercio de Ambato, por daños contra el Estado por más de 200 millones de dólares. En 2010 la empresa regresó al país luego de que la Contraloría del Estado eliminó las glosas que tenía la compañía.
Ecuador es deficitario en la generación de electricidad y sus centrales hidroeléctricas cubren un 66% de la demanda (unos 50 000 MW/h) en condiciones normales. Colombia aporta con un 10% de la energía.