El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, espera que los primeros resultados de la reestructuración del sistema judicial del país empiecen a verse en dos años. “Yo les garantizo que vamos a resolver muchos y graves problemas, pero es obvio que no vamos a resolver todos los problemas”, expresó hoy el gobernante.
Recordó que en países como Chile, se impulsaron cambios profundos en el sector judicial tras la dictadura de Augusto Pinochet. Esto se logró por la decisión política del Presidente Eduardo Frei, quien fue respaldado no solo por la sociedad civil sino “por partidos políticos serios”.
“Ahí nadie se le ocurrió decir que Eduardo Frei era un dictador y que quería tomarse la justicia. Esta fue una causa de Estado en la que todos se unieron”, señaló el Mandatario en el programa televisivo Contrapunto.
Correa, proponente de la consulta popular del próximo 7 de mayo, dijo que en Chile el Presidente tuvo la oportunidad de iniciar la reestructuración judicial mediante decreto ejecutivo; sin embargo, destacó que en el Ecuador los cambios se harán por decisión popular.
“Estamos pidiendo la autorización del pueblo para iniciar los cambios”, apuntó el Jefe de Estado quien aspiró a que “la clase política sensata de la oposición comprenda que es una cuestión de Estado y se una en este esfuerzo”.
El Mandatario, que goza de un alto grado de aprobación de gestión (77%, a marzo de 2011, según las encuentras), dijo que con la seguridad jurídica no solo que se prevé disminuir la delincuencia y la corrupción sino mejora el turismo y la inversión.
Al momento, el Ejecutivo trabaja con asesores judiciales de Chile y Brasil para preparar un proyecto de reestructuración que incluye cinco ejes: un modelo de gestión estratégico que contempla la existencia de un administrador de juzgados que organice aspectos como los horarios de las audiencias; la gestión de talento humano para la designación de jueces con la existencia de una veeduría; y el plan de acceso a la justicia que implica descentralización y desconcentración para la facilidad de procesos.
“Por qué debe haber un Palacio de Justicia donde están concentradas todos los juzgados, por qué no pueden ser como las unidades de policía comunitaria que están en los barrios y ahí tener juzgados… eso se está planificando”, anotó el mandatario durante una entrevista en una radio local.
Otro de los ejes es el plan de tecnología e información, un proyecto que ya se trabaja con éxito en tres estados del sur Brasil donde viven alrededor de 25 millones de personas, casi el doble de la población ecuatoriana que tiene poco más de 14 millones de habitantes.
“Ahí ya tienen justicia cero papeles cuando antes tenían una gran congestión de causas. Con eso se gana en agilidad y transparencia”, sostuvo al recordar que en el país existen más de 1.100 mil causas represadas.
La asesoría también trabaja en un plan para mejorar la infraestructura y equipamiento para optimizar los procesos judiciales.