Un simulacro coordinado con la Policía y con la participación de los habitantes de Colta, una comunidad de la provincia de Chimborazo, terminó con la captura de un grupo de sospechosos que son acusados de robar en el sector.
Las alarmas comenzaron a zonar en la mañana. Los habitantes corrían, como parte del simulacro para probar las alarmas comunitarias. Pero enseguida un grupo de pobladores denunció que se había habían robado una camioneta y en ella habían embarcado unos borregos.
La comunidad y la Policía persiguió al grupo de de sospechosos. Los agentes lograron capturarlos y los acusados fueron llevados al centro de la comunidad, donde les preguntaron sobre el hecho. Luego los detenidos fueron azotaron con ortiga, una planta que irrita la piel, y después bañados con agua fría, como parte del castigo indígena.
El mayor de policía, Marcos Nieto, explicó que desde ahora la comunidad de Colta cuenta con un sistema de alarmas, colocadas. Así, al ser activadas, los habitantes y la policía se una en la captura de los sospechosos.