El ministro de Finanzas, Patricio Rivera, explicó que la compra anticipada de petróleo con China corresponde a una operación comercial innovadora, que se ajusta a las normas legales ecuatorianas y que permite contar con recursos de libre disponibilidad de manera ágil.
La venta de crudo ecuatoriano se negoció con un precio de mercado (al momento de la entrega del crudo), menos un castigo (también según el mercado internacional), más un premio por la seguridad de la provisión de petróleo. “Este valor adicional el Ecuador no lo utilizaba porque a nadie se le ocurrió cobrar un valor por la provisión”.
El premio establecido en el contrato por el servicio de entrega es de 0,50 dólares fijos por barril “Al precio del mercado se paga un costo adicional por el servicio de la provisión segura. Es un súper buen negocio”, afirmó.
El ministro Rivera aclaró que no se trata de una operación de endeudamiento público sino que de una operación comercial que se ubica dentro de los pasivos de la caja fiscal. En el primer caso, explicó que los recursos se utilizan para programas específicos, mientras que en el segundo caso, se tratan de recursos de libre disponibilidad.
Además, indicó que el endeudamiento público es rígido y demanda de un proceso demoroso; contrario a una operación de venta anticipada cuya gestión es más inmediata. “Si damos categoría de deuda pública le damos proceso de deuda pública y trabaríamos todo (…) hay que aclarar que la operación comercial, nunca que se registra como deuda.”, sostuvo.
El ministro puntualizó que el procedimiento con China está regido por la Constitución y las normativas legales.
La venta anticipada de petróleo tendrá vigencia a partir de agosto con una duración de dos años con una tasa de interés del 7.08%.