Ecuador considera que el deber de los gobiernos es preservar la biodiversidad, un área estratégica para el desarrollo, pero también promover su investigación para establecer sus posibles usos en campos tan variados como la medicina, la agricultura o la energía.
Así lo señaló hoy el Secretario Nacional de Ciencia y Tecnología de Ecuador, Manuel Baldeón, quien participa en Ginebra en una reunión de la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI) sobrelas futuras reglas mundiales para el acceso a los recursos genéticos de los países .
En ese foro, el representante ecuatoriano defendió la importancia de la investigación científica y de la tecnología aplicada para la conservación de la biodiversidad y la generación de conocimiento que permita dar un valor agregado a los recursos naturales.
«La mayoría de medicamentos proviene de plantas, microbios, animales y hongos, es decir de la biodiversidad», sostuvo Baldeón.
Explicó que las farmacéuticas «están volviendo a la naturaleza y a la biodiversidad para producir», pues se trata de «un gran laboratorio natural» en el que se buscan las innovaciones médicas.
Como ejemplo, mencionó una fruta llamada mortiño, de comprobadas propiedades antioxidantes y de la que se derivan compuestos capaces de prevenir enfermedades cardiovasculares (la primera causa de muerte en el mundo).
En vista de estas constataciones, Baldeón dijo que su Gobierno sostiene que en el acceso a los recursos genéticos se deben respetar los principios de preservación del medio ambiente y de un reparto justo de los beneficios de su explotación, en función del aporte de cada actor (público y privado).
«Es necesario que llegue la tecnología y la financiación privada extranjera», sostuvo.
Al mismo tiempo que favorecer la participación privada, Baldeón sostuvo que Ecuador busca garantizar que no se repitan abusos del pasado, como cuando «una multinacional llegaba para hacer estudios, se apropiaba de toda la información del recurso genético y no dejaba nada para el país que es el dueño».
Según los datos más recientes, Ecuador alberga 25.000 especies de plantas vasculares (de las que se obtienen medicamentos), de las que el 20 por ciento son endémicas; su fauna incluye 402 especies de anfibios, 380 de reptiles, 1.559 de pájaros y 324 de mamíferos, en tanto que se conoce menos del 5 por ciento de los microorganismos.