Un juez de Nueva York dictaminó hoy que no es admisible la reclamación de 945 millones de dólares hecha por la firma Cantor Fitzgerald a American Airlines por las pérdidas que sufrió a consecuencia de los atentados terroristas del 11 de septiembre de 2001, en los que murieron 658 de sus empleados.
En una decisión escrita, el juez del distrito sur Alvin Hellerstein instó a la firma de inversiones a rebajar la cantidad, si quiere que su demanda sea admitida.
Según la ley de Nueva York, la compañía no puede realizar demandas por «las pérdidas a consecuencia de las muertes y heridas de sus trabajadores», señaló el juez tras reconocer que «nadie puede negar los daños emocionales y financieros sufridos por Cantor Fitzergarld y las familias de sus empleados».
La firma de inversión, que vio cómo morían dos tercios de su plantilla en los atentados, reclamaba inicialmente 100 millones de dólares a la aerolínea que operaba el primer avión que se estrelló contra una de las Torres Gemelas, donde se encontraban las oficinas de Cantor Fitzergarld.
Sin embargo, recientemente elevó esa cifra hasta los 945 millones de dólares que reclama ahora, una cantidad que, según el juez, ha sido inflada a causa de la interrupción del negocio que sufrió la empresa por la muerte de sus empleados.
A juicio del magistrado, Cantor Fitzergarld sólo puede demandar a la aerolínea por los daños causados en su propiedad y las pérdidas de beneficios derivadas de esos daños.
Por ello, el juez ha ordenado a la compañía que revise a la baja la cantidad que pretende obtener si quiere que su demanda sea admitida, y ha citado a las partes para primeros de marzo, fecha en la que se estudiará si los implicados han llegado a un acuerdo extrajudicial o si la causa se puede llevar a juicio.
Cantor Fitzergarld, cuyas oficinas fueron destruidas en los atentados, presentó en noviembre de 2004 una demanda contra la aerolínea y su matriz, AMR, por la que reclamaba compensaciones económicas a los responsables del vuelo que se estrelló contra la Torre Norte.