Estados Unidos cooperará con Colombia, Ecuador, Panamá y Venezuela para impedir que barcos con bandera de esos países pesquen, sin autorización y en temporada de veda, el atún en el Pacífico oriental, indicó hoy una fuente del gobierno.
«Estos países tienen naves pesqueras que no cumplen con las reglas de la Comisión Interamericana del Atún Tropical de la cual son miembros, y que cometieron infracciones en 2009 y 2010», dijo a EFE, Laura Cimo, asesora de política internacional en la Administración Nacional de Océanos, Aire y el Espacio.
La agencia, conocida por su sigla en inglés NOAA, envió esta semana al Congreso su informe bianual acerca del cumplimiento con las normas de la comisión interamericana y de la Comisión Internacional de Conservación del Atún en el Atlántico.
«Aunque se registraron esas transgresiones, los gobiernos de estos países cooperan activamente con el control de las pesquerías y estamos haciendo progresos, por lo cual reconocemos esos esfuerzos», añadió Cimo.
Bajo la ley de Estados Unidos los países que no cooperen en la aplicación de las normas internacionales sobre la pesca del atún pueden ser objeto de sanciones, entre ellas la prohibición de entrada a puertos de EE.UU. de buques de esas banderas, y la veda de importación de algunos productos pesqueros de esos países.
Según el informe de 126 páginas, las transgresiones más frecuentes consisten en la operación en el océano Pacífico oriental de buques que no tienen autorización para pescar mediante su registro en la comisión interamericana, y la pesca durante las temporadas de veda.
El informe también citó transgresiones por parte de naves pesqueras con bandera de Italia y Portugal.
Cimo explicó que cada año se estipulan temporadas de veda de la pesca del atún. Estas temporadas, adecuadas al ciclo biológico del atún, permiten la reposición de cardúmenes.
El informe mencionó incidentes de ambos tipos, y en el caso de Ecuador la situación de un buque pesquero que incrementó su capacidad de captura en violación de las reglas de la comisión.
Cimo aclaró que se trata de buques que llevan la bandera de los países mencionados, y no necesariamente vinculados a la industria pesquera de los respectivos países.
«Puede que transporten la pesca a mercados de otros países, pero bajo las reglas internacionales los países que otorgan bandera a los buques son responsables de las operaciones de pesca de esas naves», añadió.