En declaraciones a la BBC, un integrante del grupo «Anonymous» justificó los ciberataques contra la Fiscalía sueca por el hecho de que esta ha pedido al Reino Unido la extradición de Assange.
Sobre a multinacional estadounidense de tarjetas de crédito, el integrante del grupo Anonymous dijo a la emisora británica que se están haciendo «muchas cosas» contra las empresas que han dejado de colaborar con Wikileaks o de las que se cree que han atacado su portal de internet.
«Las webs que están cediendo a las presiones de los gobiernos se han convertido en otros tantos blancos», afirmó el ciberpirata.
«Como organización, siempre hemos mantenido una postura firme en el tema de la censura y la libertad de expresión y nos hemos enfrentado a quienes tratan de destruirla por cualquier método», agregó el miembro de «Anonymous».
«Creemos que el asunto de Wikileaks supera ya la simple filtración de documentos. Se ha convertido en un campo de batalla de la gente frente al Gobierno», explicó el ciberpirata, que se identificó por el nombre de Coldblood (en inglés: sangre fría).
«La idea no es borrar del mapa esos portales sino advertir a las compañías de que notarán un incremento del tráfico, y esto significa que aumentará también el coste de gestionar la red», afirmó.
Según expertos en seguridad, la web de Mastercard ha estado sometida a un ataque consistente en inundarla con tantas solicitudes de página que termina por «caer».
El acceso a la web es con todo posible de modo intermitente y desde distintos países.