Durante su visita a la capital argentina, Buenos Aires, el Primer Mandatario Rafael Correa participó en una ceremonia en la cual se develó un busto de la libertadora del libertador, Manuela Saenz, en el parque de la mujer de Puerto Madero en Buenos Aires.
El Primer Mandatario resaltó la imagen de la ecuatoriana y su papel en la historia. “El corazón de Manuelita era tan grande, generoso y entregado, que no le cabía en el pecho”, manifestó durante su intervención.
En el acto participaron los niños de la escuela República del Ecuador, de la capital porteña, quienes pudieron cortar junto al Primer Mandatario la cinta para la presentación en público de la figura de Manuelita Sáenz.
Hernán Lobardi, ministro de Cultura de la ciudad de Buenos Aires, manifestó el cariño del pueblo argentino por el Ecuador y reafirmó el compromiso y el apoyo que los argentinos brindaron al Presidente Correa durante los acontecimientos del 30 de septiembre.
Lombardi comparó esos acontecimientos con la crisis argentina de los 80, cuando el mandatario Raúl Alfonsín tuvo que enfrentarse a un grupo de “insurrectos”. El funcionario aseguró que a partir de estas experiencias similares la estatua develada en Puerto Madero se convierte en un metáfora de la democracia.