La empresa minera San Esteban, dueña del yacimiento San José donde quedaron atrapados 33 mineros por 79 días tras un derrumbe, negó en un comunicado que los mineros hubieran advertido del riesgo el día del accidente y hubieran solicitado autorización para abandonar la mina.
“A ninguno de nosotros, los responsables de la operación de la mina en esos momentos, se nos manifestó, ni por parte de algún trabajador ni del Jefe de Turno a cargo, comentario alguno respecto de ruidos o explosiones inusuales”, asegura el comunicado.
“Ni mucho menos se nos solicitó permiso para abandonar las faenas en virtud del presunto riesgo que se corría”, añade el texto, firmado por el jefe de operaciones Carlos Pinilla, y el gerente de minas, Pedro Simunovic.
Carlos Vilches, parlamentario oficialista que integra la comisión investigadora de la Cámara de Diputados sobre el accidente en la mina San José, explicó luego de conversar con el minero Juan Illanes que los trabajadores habrían advertido del peligro de derrumbe la mañana del accidente.
“él me dijo: la mañana del accidente, como a las 11H00, la mina empezó a avisar de que había problemas, porque empezaron ruidos profundos, grandes y esos resonaban dentro la mina porque tiene muchos caserones (cuevas); avisamos y pedimos permiso para salir de la mina, pero no nos dejaron”, contó Vilches a la AFP.
Por su parte, la empresa, manifestó su “absoluta y total sorpresa respecto de aquellos dichos” y solicitó que las afirmaciones sean investigadas y esclarecidas “hasta las últimas consecuencias”.
Los 33 mineros quedaron atrapados el 5 de agosto y el recién miércoles pasado fueron rescatados, tras una impecable operación que se extendió por 22 horas luego de 69 días de espera.