El hombre que señaló que intentaron pagarle para asesinar al presidente de la República, Rafael Correa, ha sido incluido en el programa de Víctimas y Testigos Protegidos de la Fiscalía General del Estado, informó hoy el Ministro de Justicia y Derechos Humanos, José Serrano.
El propio Correa informó ayer de la existencia de ese testigo.
Serrano indicó que hace aproximadamente diez días, «luego de los sucesos del 30 de septiembre, un testigo, que este rato está dentro del programa de Víctimas y Testigos Protegidos de la Fiscalía General del Estado, testimonió señalando que había tenido acercamientos específicamente con el señor Araújo, en torno a la posibilidad de atentar contra la vida del presidente».
Se refirió al ex militar Fidel Araújo, quien está ahora detenido en el proceso de investigaciones sobre los hechos ocurridos el pasado 30 de septiembre, cuando una protesta de policías de tropa en rechazo a la eliminación de incentivos profesionales desató una crisis que el Gobierno interpretó como un intento de golpe de Estado.
Araújo, cercano al ex jefe de Estado, Lucio Gutiérrez, quien ha deslindado cualquier conexión con el levantamiento, fue captado por las cámaras de televisión en el Regimiento Quito donde se concentraron las protestas de los policías, y en principio señaló que su presencia en el lugar fue una coincidencia.
El testimonio del hombre, cuya identidad y otros datos se mantienen en reserva, constituye para Serrano «una evidencia más de esta conexión que se pretendió burlar, por parte del señor Araújo, señalando que él solamente estaba pasando por el lugar de los hechos».
Ello, dijo, pese a que «en realidad se comienzan a determinar ya una serie más de indicios y presunciones de que no solamente participó e instigó presuntamente para atentar contra la seguridad del Estado, sino incluso para atentar contra la propia vida del presidente».
Según Serrano, «el testimonio de él es elocuente y muy claro en torno a que efectivamente él tuvo un acercamiento en el cual se le propuso una paga para atentar contra la vida del presidente».
Se trató, dijo, de «un testimonio absolutamente voluntario, el acercamiento se dio unilateralmente por parte de él, de la persona, y obviamente eso determina también que el testimonio deba ser claramente evaluado y que se determine la vinculación directa con la propia presencia del señor Araújo» en el Regimiento.
Insistió en que se trata de una «persona que se acercó voluntariamente a rendir su testimonio» y señaló que ahora, en la fase de instrucción del caso, no necesariamente se lo llamará a declarar nuevamente.
«En la fase de juzgamiento nosotros pediremos y solicitaremos que la persona que rindió su versión libre y voluntaria acuda nuevamente a rendir ya su testimonio bajo juramento», comentó al asegurar que aún se deben buscar más pruebas en el caso.
édgar Pavón, abogado de Fidel Araújo, apuntó que «en toda la versión rendida existen una serie de contradicciones, que realmente este ciudadano puede ir a parar a la cárcel por falso testimonio».