Pudieron ser localizados gracias a un radioaficionado mexicano que escuchó su mensaje de auxilio y dio parte a las autoridades.
Elvis Saltos y Rolando Gracia fueron enviados el 7 de septiembre a 370 millas en altamar para que abastecieran de combustible al barco pesquero Angel Gabriel.
Saltos relata que el barco nunca se encontró en el lugar que les habían indicado y que llevaban el combustible justo para ir, no para volver, pues tenían planeado regresar en el barco que supuestamente debían abastecer.
José Vera Ayala, capitán de puerto de Manta, indicó que fueron encontrados aproximadamente a 25 millas frente a Panamá.
Apenas llegaron a Manta fueron atendidos por médicos, pues durante los 25 días no se alimentaron ni bebieron agua.
El estado de Rolando Gracia es delicado, por su severa deshidratación; mientras que Elvis está estable y fue recibido por sus familiares.