El Programa de Alimentación Escolar –PAE– del Ministerio de Educación amplió su cobertura a 200 días del año lectivo e incrementó su inversión a 65 millones de dólares, a fin de atender a 1’448.839 beneficiarios; con desayuno se atiende a 1’287.828 y con refrigerio a 161.011.
Hasta antes de este Gobierno, se atendía solamente 80 días de alimentación escolar; en ciertas instituciones educativas se atendía solo desayuno, en otras solo almuerzo y en otras ambas comidas. Con la llegada de la revolución ciudadana, hasta 2009 se subió la cobertura del servicio a 120 días y desde 2010 a los 200 días de clases, focalizada en el desayuno (o refrigerio). Cabe destacar que el desayuno es la comida más importante del día, sobre todo en los establecimientos educativos.
La inversión en alimentación escolar subió de 55 millones en 2009 a 65 millones en 2010, para posibilitar la ampliación del servicio.
Según explicó el Director del PAE, Justo Tobar, el desayuno consiste en la entrega de una colada saborizada y alternadamente galletas o granola; y el refrigerio consiste en leche saborizada lista para el consumo. Tanto los productos del desayuno como los del refrigerio son enriquecidos con micronutrientes.
El objeto del desayuno y refrigerio es el mejoramiento de la calidad educativa; aumentar la asistencia de los estudiantes a clases; e incrementar la capacidad de aprendizaje de los escolares en cuanto a atención, concentración y retención.
Foto: El Telégrafo