Las fuerzas armadas, así como los medios de comunicación, figuran entre las instituciones más confiables en América Latina, muy por encima de las iglesias, los parlamentos y los partidos políticos, según una encuesta regional de la Flacso divulgada hoy.
Un 85% de los latinoamericanos se opone a la abolición de las fuerzas armadas y un 43% deposita su confianza en ellas, nivel solo superado por los medios de comunicación (59%) y la Presidencia (48%), según el estudio efectuado en 18 países de la región.
“El promedio latinoamericano indica que el 43% deposita su confianza en ellas (las fuerzas armadas)”, indica este primer estudio sobre 'Gobernabilidad y Convivencia Democrática', que consultó a 9 057 personas en la región.
El nivel de confianza hacia las Fuerzas Armadas está ligado, en parte, a la inseguridad, que para un 91% de los consultados es el principal problema, según la Flacso (Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales), un centro de estudios intergubernamental que tiene su sede central en San José.
También está relacionado a que un 77% considera que los militares son profesionales y no deliberantes, por lo que es “nada probable” que haya un golpe de Estado, explicó el secretario general de la Flacso, Francisco Rojas.
Como éste es el primer estudio de este tipo de esta entidad, no se pueden comparar sus resultados, pero en anteriores sondeos de otras instituciones las fuerzas armadas solían alcanzar altos niveles de desconfianza, en una región que vivió dictaduras militares en los años 70 y 80.
Las iglesias tienen un nivel “medio” de confianza, mientras que los parlamentos y los partidos políticos tienen “muy bajo nivel de confianza”, dijo Rojas.
Los políticos reciben la peor calificación, “ya que el 86% de la población los considera poco o nada confiables”, según el estudio.
La encuesta fue realizada en conjunto con la empresa de opinión Pública Ipsos en noviembre y diciembre del año pasado, y tiene un margen de error de 1%.
Los países donde “la percepción de la probabilidad de un golpe de Estado es alta son Paraguay (41%) y Ecuador (39%)”, por encima de Honduras (31%), donde hubo uno el año pasado, según el estudio. En contraste, el 93,8% de los chilenos descarta un golpe.
En los dos países que han abolido las Fuerzas Armadas (Costa Rica en 1948 y Panamá en 1994) hubo resultados dispares ante la consulta sobre la conveniencia de restituir el ejército: el 88,4% de los costarricenses se opuso a tal posibilidad, que fue apoyada por el 47,4% de los panameños.
La inseguridad es el mayor problema para más del 90% de los ciudadanos en El Salvador, Perú, Brasil Bolivia, Guatemala, Panamá, Venezuela, Honduras y Costa Rica. El nivel más bajo se dio en Uruguay con 85,5%.
“Un 30,9% de los latinoamericanos encuestados se preocupan siempre de ser víctimas de un robo y un 35% se preocupan casi siempre”, dice el informe.
Un 58% dijo que en sus barrios hay venta y consumo de drogas, mientras que muchos atribuyeron la inseguridad a factores ligados a la desigualdad: 21% al desempleo, 18% a falta de oportunidades educativas y 12% a la pobreza.
Otro 9,2% la atribuyó al consumo de drogas y un 6,1% al narcotráfico.
La confianza en los partidos es más baja en Argentina, Bolivia y Guatemala (apenas 1%), y el nivel más alto se dio en Uruguay (9,2%).