Moscú superó el jueves la temperatura máxima desde que se tiene registro por segunda vez en una semana, mientras continúa una persistente ola de calor en la capital y se suceden incendios forestales en otros puntos del país.
En Moscú la temperatura subió a 38,2 centígrados (100 Fahrenheit), superando por una fracción el registro del lunes, informaron las agencias noticiosas nacionales. La ola de calor viene prolongándose desde hace semanas.
Se aconsejó a los moscovitas tomarse el día libre y permanecer bajo techo debido al calor y al humo producido por los incendios de turberas en los suburbios.
Los incendios forestales seguían ardiendo alrededor de la capital y en otras partes del país, y los bomberos batallaban en una superficie total de 86.000 hectáreas (212.500 acres), dijo el ministerio de emergencias en su cibersitio.