La aprobación de la Ley de Hidrocarburos, a través del Ministerio de la Ley y no por votación del parlamento, ha levantado las protestas de las bancadas de la oposición. La falta de quórum que se registró en la sesión de anoche originó la protesta de los legisladores contrarios a las propuestas de la bancada oficialista.
Los legisladores de Alianza Libertad se pronunciaron en contra de la ausencia de los legisladores de Alianza País, en la sesión del domingo. Paco Moncayo, miembro del bloque sostuvo que la Ley Orgánica del legislativo ha impedido legislar .
Además, Moncayo también señaló que hay un grupo de legisladores que se han encerrado en sus propias ideas, por ello, no han logrado escuchar la voz de la razón y han esperado el último minuto para tratar las leyes.
En la presidencia de la Asamblea, su titular, Fernando Cordero, ve a la aprobación de la norma de petróleos como un triunfo para el país.
Cordero sostuvo que hay grupos en el legislativo que están aliados con quienes han extorsionado al país. El presidente del Legislativo dijo que el bloque oficialista se sienten serenos por lo actuado ayer.
En el Ministerio de Recursos naturales no renovables, el titular dela secretaría de Estado, Wilson Pástor, indicó ocho puntos favorables de la Ley de Hidrocarburos aprobada por el Ministerio de la Ley.
Pástor señaló que la producción petrolera desde este lunes es 100% ecuatoriana. Explicó que las petroleras se habían beneficiado con el modelo de prestación de servicios, de manera que si subía el precio del crudo, ellas aumentaban sus ganancias sin que necesariamente aumentaran su producción.
La nueva ley permite que el Estado reduzca la tarifa y que pacte la diferencia que se le pague a las compañías.
Desde Carondelet, la aprobación de la Ley se recibe con beneplácito. El secretario de la Administración Pública, Vinicio Alvarado, indicó que con la nueva normativa aprobada, las comunidades de los sectores donde se extrae el crudo podrán disfrutar del 12% de los recursos que genere la explotación y usarlo en provecho de sus habitantes.