Bogotá.-Tras una campaña electoral considerada como la más pacífica en décadas, los colombianos se preparan para elegir el domingo, en segunda vuelta, al sucesor del presidente álvaro Uribe entre Juan Manuel Santos y Antanas Mockus.
Pese a ello, Colombia se ha blindado con un gran dispositivo para garantizar la seguridad en los comicios, que contará con 350.000 militares y policías que cubrirán el 99,5 por ciento del territorio colombiano, según el ministro de Defensa, Gabriel Silva.
Un mapa de riesgo divulgado por este Ministerio detalló que el seis por ciento de los municipios colombianos tienen una situación de riesgo extraordinario y el cinco por ciento riesgo alto, por lo que en esas zonas habrá medidas especiales de seguridad.
Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) han intentado perpetrar algunos atentados, según el ministro, quien agregó que por esa razón las autoridades están en máxima alerta para prevenir cualquier alteración durante la jornada electoral, que auguró como la más tranquila de los últimos 30 años.
En lo que afecta a la capital, el Ejército y la Policía han dispuesto de un comando de contra-guerrillas que se encargará de vigilar Bogotá y las localidades aledañas, en particular en la localidad rural de Sumapáz, un bastión histórico de las FARC, vecina a Bogotá.
El comandante de la brigada 13 del Ejército, general Juan Pablo Amaya, aseguró hoy que se realizan «esfuerzos superiores» en esa localidad donde «las operaciones son sostenidas (…) por aire y por tierra para neutralizar cualquier pretensión que puedan tener organizaciones al margen de la ley, grupos terroristas para afectar estos comicios presidenciales».
Amaya agregó que por el momento no se ha descubierto ninguna amenaza contra la capital colombiana, pero por precaución se desplegarán más de 15.000 hombres para garantizar la seguridad.
«Para nosotros es especial porque Jolie ha resaltado un problema que a veces pasa desapercibido en la política de Estados Unidos y de la comunidad internacional de que existe este problema humanitario en la frontera de Ecuador», señaló.
En Ecuador vive una población de 53.000 refugiados, de los que el 98,5 por ciento son colombianos que viven en las provincias fronterizas, aunque según los cálculos de ACNUR hay más de 135.000 personas en el país vecino que necesitan protección.